La Gratitud Cambia La Química De Tu Cerebro

La gratitud es mágica, cuando empecé mi proceso de conciencia, la gratitud fue una de las primeras cosas que transformó mi manera de ver la vida. Se siente como si lo tienes todo y eres capaz de comerte el mundo, la creatividad se eleva, estás en un estado de conciencia tan elevado que sientes plenitud y amor por la vida. 


Según una investigación publicada en la revista Cerebral Cortex, sentir gratitud o realizar actos de bondad estimula el hipotálamo (la parte de nuestro cerebro que regula una serie de funciones corporales, incluido el estrés) inundando el cerebro con una sustancia química llamada dopamina que produce la sensación de bienestar, felicidad, placer y vitalidad.


La gratitud tiene beneficios innumerables y no solo se trata de decir gracias, sino de enfocar tu foco y energía en lo que existe.


Todos tenemos relaciones, sean de pareja o interpersonales, si quieres ser feliz con ellos, suelta las expectativas de lo que piensas que ellos deben o no deben hacer y siente gratitud por lo que son y hacen cada día.

 

Es muy fácil poner nuestra atención en lo que no hacen los demás, pero que tal si agradecemos por lo hermoso que es tenerlos en nuestra vidas y por lo que los elegimos, no queramos cambiar a los demás con expectativas falsas que quizás no son posibles cambiar, pero tu si puedes cambiar como ver a la persona o a las personas de tu alrededor y aceptarlas como son. 

 

Qué tal si dejamos de pelear tanto con la vida y empezamos a sentirnos agradecidos porque de los millones de espermatozoides que viajaban en el útero de tu mamá, tu fuiste el que ganó la carrera y tienes la oportunidad de vivir esta vida en plenitud y felicidad. 

 

Que tal si en vez de pelear con lo de afuera, agradezco lo que tengo dentro y lo que sí existe en mi vida, que estoy segura que son muchas cosas grandiosas las que puedes agradecer. 


Aquí te dejo algunos de los más grandes beneficios de la gratitud:

  • Expresar gratitud fortalece nuestro cuerpo y nuestro cerebro al reducir el cortisol, la hormona del estrés y elevar la dopamina, la neurohormona que hace que te sientas “bien”.
  • Cultivar la gratitud mejora las relaciones personales.
  • Los sentimientos de gratitud disminuirán los niveles de dolor debido a la afluencia de dopamina.
  • La gratitud promueve un mejor sueño, fortalece nuestro sistema inmunológico y mejora la sanación y la regeneración más rápida del cuerpo.
  • La gratitud alivia el estrés; nos hace más resistentes a los eventos traumáticos y estresantes.
  • Meditar sobre las bendiciones y expresar gratitud reduce la ansiedad y la depresión.
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